martes, 2 de marzo de 2010

Un año en el autoexilio

Ayer cumplí un año viviendo en Colombia. Qué fácil se dice. Qué difícil hacer un balance. Por un lado, la mitad del corazón se deja atrás en la tierra que uno llama hogar, y por otro el corazón siembra nuevas esperanzas en el lugar al que se llega.

Y balance no es lo que buscamos todos en la vida? Balance entre vida y trabajo. Balance entre ocio y responsabilidad. Balance entre calorías y ejercicio. Balance entre Dios y el Diablo... Hacer un balance significa poner cosas buenas y malas, y creo que en esta experiencia nada es completamente bueno o malo.

Lo que sí creo es que vivir lejos de la tierra que lo ve nacer a uno, lejos de la familia y amigos de toda la vida, es una experiencia enriquecedora en todos los aspectos, siempre que no sea por circunstancias lamentables, como bien lo dice León Gieco. Más aún cuando esa tierra que lo recibe a uno es Colombia, y aquí vale la pena hacer una retrospectiva...

Recuerdo la expresión en la cara de algunas personas hace un año cuando les decía que me iba a vivir a Colombia. Puedo decir con certeza que el 80% arqueaban las cejas y mencionaban la palabra "COLOMBIA" con entonación interrogante-aterradora, como si yo estuviera completamente loco. Creo que en igual porcentaje la gente me daba su opinión de Colombia como si fuera "tierra de nadie", en donde la inseguridad y el narcotráfico eran el pan de cada día.

Hoy, a un año de vivir aquí, puedo decir que Colombia tiene los mismos retos que tiene cualquier país en América Latina y que, a diferencia de muchos otros, los ha venido superando a lo largo de los últimos 10 años. La inseguridad y el narcotráfico son el cáncer de nuestros países, pero siento que Colombia los ha intentado combatir con voluntad real y mucho mejores resultados que tantos otros.

Y contrario a esos estereotipos, lo que sí hallé en Colombia fue un lugar lleno de gente cálida, extraordinariamente amable y agradable, con auténtica pasión en la sangre que me imagino que más allá de hacerles llevar un ritmo estupendo en el reguetón o el vallenato, se les nota en todo lo que hacen, en la manera en la que sonríen y en la forma en que encaran la vida dándose siempre un espacio para "gozarla".

Sí, dejé amigos y familia atrás, gente a la que quiero mucho y no puedo dejar de pensar en cuándo será la siguiente vez en que los vea. Pero para ser justo también debo decir que acá he encontrado gente fantástica a la que me alegra enormemente haber tenido oportunidad de conocer más en profundidad. Al final, la gente es la que hace un país y un lugar... y si por la gente que he conocido puedo juzgar a Colombia, estoy feliz de haber tenido la oportunidad de poder escribir estas crónicas desde el autoexilio.

DEDICATORIA ESPECIAL: en esta especie de aniversario quiero dedicar el espacio de hoy a gente con nombre y apellido - a Marie, a mis padres, a los Pautasio Queirolo, a la Vicky, a los Camacho, a los Gaona, a mi equipo en México Luis Carlos, Castellanitos, Berus, Adrix, Ro, Nuri, Minkus, Wendinha, Kandinsky, Páez, Carola y Fango, a mi equipo en Colombia (muy extenso para nombrar), a Renix, a Ingrid Motta, a Claudia Adriasola, a mis tweeters favorit@s @uva98, @MMIUXX, @hiperjana, @luserrano... gente que llena mi vida en cualquier lugar del mundo en el que esté.

12 comentarios:

  1. Es para nosotros un placer tenerte en Colombia, nos encargaremos de que la sigas "gozando"!

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  2. Guido, que padre texto, habla mucho de lo que tú eres. Te mando un fuerte abrazo y todo mi cariño.

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  3. Mi querido Gaona! Colombia logró el milagro de volverte un sentimental! al menos públicamente! jejeje
    Yo no puedo sino estar de acuerdo contigo. México y Colombia son mis dos segundos hogares (si puede haber dos segundos hogares y no un segundo y un tercero, o un segundo y un segundo y medio) y me alegro de que estés disfrutando su estacia en Colombia.
    Muchos besos.

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  4. Gaona, dicen por ahí que todos saben que las aves migratorias siempre encuentran el camino de regreso. Acá te esperamos siempre.

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  5. Estimado Guido,

    Recibe un fuerte abrazo desde la distancia, un gusto poder leerte feliz, contento y disfrutando de las cosas buenas que tiene la vida!
    Mario Páez.

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  6. Querido Guido
    Que bueno es saber que te va muy bien y que no te olvidas de nosotros, así como nosotros no nos olvidamos de ti. Disfruta mucho,te esperamos cuando vengas de visita o ya de plano regreses aquí, a tu casa.
    Fango

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  7. Guidinho!!! Muchas gracias por siempre ser parte de nosotros a pesar de la distancia, gracias por siempre tener una palabra de aliento para mi y por enseñarnos que para crecer nos tenemos que arriesgar!!! Me da mucho gusto que te sientas feliz de estar allá y por los amigos de acá ni te preocupes... siempre te estaremos esperando. Te mando un beso y la mejor de las suertes!! Wendinha

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  8. snif snif! felíz primer aniversario primo!! que linda etapa ésta q vives! estoy segura de que tus días siempre estarán llenos de felicidad, amor, pasión , alegría y trabajo... y claro también de una q otra dificultad, por aquello del balance, el ying y el yang... tu sabes!
    hip hip hurra! mucho éxito! aquí, allá y en todos lados!
    abrazos y besos!

    YeYe

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  9. Guido, sigues siendo un ejemplo, aquí, allá o en donde estés. Felicidades por conquistar tu mundo, y recuerda que siempre encontrarás un espacio para ti en todos nosotros.
    Un abrazo!!!

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  10. Chale Guido, creo que hasta me dieron ganas de llorar.. Y si, que rápido se ha pasado el tiempo y que gusto saber que ahí la llevas cosechando nuevos éxitos por allá (aunque sabiamos que así sería). De verdad fue un gusto compartir contigo algunos meses como equipo, y es un mayor gusto el poder teniendo contacto a la distancia. Te mando un fuerte abrazo y muchas gracias por la mención, es de verdad un gran honor!

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  11. Me encanta tu blog Guido! Que bueno que te estés gozando Colombia y que la consideres como tu segundo hogar... Sólo recibimos a gente extraordinaria y especial como tu en mi tierrita! Un abrazo gigante!

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  12. Muchísimas gracias a todos por sus comentarios. Siempre los leo y me dan ánimos para seguir escribiendo cuanta estupidez se me viene a la mente.

    Un abrazo!

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